A comienzos de 1976 Roxy Music anunciaban su separación para dedicarse sus miembros a diversos proyectos solistas en los próximos años. No fue una separación definitiva aunque tampoco se puso fecha de regreso. El Siren Tour fue el más largo y agotador de su carrera y los infructuosos intentos para penetrar el mercado Norteamericano los llevó a tomar la sana decisión de seguir rumbos separados para recargar las baterías y replantear el futuro de la banda. Y como colofón a 4 años de intensa actividad lanzan este album en vivo, la pieza que faltaba en una de las discografías más influyentes de los 70. El único defecto de este Viva! es la cantidad. Dada la trayectoria de Roxy Music lo mínimo que se esperaba era un album doble, cualquier fan familiarizado con los bootlegs de Roxy sabía de muchos excelentes conciertos de donde escoger, pero por razones inexplicables el lanzamiento quedó en un disco sencillo. En varias entrevistas concedidas entonces por Andy McKay y Phil Manzanera, ambos expresaron su disgusto por el hecho de que ni siquiera se les consultó a la hora de hacer la selección de temas. Pero para bien o para mal este es el único registro oficial de Roxy Music en directo durante su etapa clásica. Los ocho temas incluidos cubren 3 ciudades Británicas (Glasgow, Newcastle, Londres) en un período de 2 años (1973-1975) y demuestran que la grandeza de Roxy no era sólo producto de los estudios de grabación. A excepción de la versión de ‘The Bogus Man’ (buena pero con altibajos, aunque reconozco que se trata de una pieza difícil de tocar en vivo), los temas igualan o superan a los originales: ‘Out Of The Blue’ suena tan efectiva y majestuosa como siempre, ‘Chance Meeting’ conserva todo el misterio de la original, ‘Both Ends Burning’ mejora apreciablemente respecto a la incluida en Siren, y las versiones alargadas de ‘If There Is Something’ y ‘In Every Dream Home A Heartache’ son estupendas, especialmente la primera gracias a la soberbia labor de Eddie Jobson. El CD se cierra con un ‘Do The Strand’ tocado a toda prisa y que termina a secas, sin aplausos ni nada; por cierto que entre la corte de bajistas que la banda llevó a lo largo de esos años, en ‘The Bogus Man’ es bastante roconocible el estilo del gran John Wetton, quien se dió el lujo de rechazar un puesto fijo en Roxy para irse con Uriah Heep. A pesar que los temas fueron seleccionados de las 3 fuentes ya citadas, todas las fotos de la carátula provienen del concierto final del Siren Tour en el Wembley Empire Pool de Londres en Noviembre de 1975, su último recital en los 70 y en el que por primera vez (al menos en Inglaterra) se utilizó una gigantesca pantalla en circuito cerrado para que todo el público pudiera apreciar los detalles del concierto (de ahí la estética de las fotos). Un disco que se hace muy corto pero indispensable para cualquier fan de Roxy Music.



Categoría: 70's | Vistas: 1322 | Agregado por: Aldoux | Fecha: 29-Ago-2010

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